Pastificio Lucio Garofalo

Pastificio Lucio Garofalo fue fundada en 1789 en Gragnano, la cuna de la pasta. Las condiciones climáticas óptimas para el secado de la pasta y la presencia del agua de manantial que alimentaba los molinos convirtieron a Gragnano en el lugar ideal para la producción de este alimento. A finales del siglo XVIII, el señor Michele Garofalo obtuvo, mediante Regio Decreto, la exclusiva concesión para la producción de pasta, gracias a su reputación de ser de excelente calidad. Con el tiempo, la fórmula original de Garofalo, que combina la innovación con la búsqueda constante de la calidad, ha sido recompensada. La empresa se ha convertido en el motor del progreso en Gragnano. Además de la primera planta industrial en el centro del pueblo, se ha añadido otra en las cercanías. La producción ha aumentado y Garofalo ha expandido su presencia principalmente en el extranjero como marca privada. En 2001, lanzó una línea de marca propia en Italia, que rápidamente se convirtió en un referente para los consumidores de pasta de alta calidad.